La Inspección a Técnica de Vehículos (ITV) tiene como principal objetivo evitar los accidentes que pueden producirse por el mal estado del coche. En este sentido, los principales problemas que se detectan en la revisión están relacionados con los frenos, los ejes, la suspensión, el bastidor, el motor y la iluminación.
La Comunidad de Madrid y Cataluña lideran el ranking en el número de estaciones de ITV, tanto es así que muchos conductores de estas comunidades siempre prefieren pasar su itv más cercana en Madrid y Cataluña lo más próximo a sus domicilios, y así evitar largos desplazamientos para pasar la inspección técnica de su vehículo.
No hay que olvidar tampoco que existe también otros defectos destacables que se ven en la ITV; el mal sistema de carburación que da como resultado un exceso de emisión de gases contaminantes como el monóxido de carbono, una de las sustancias que más polucionan el aire. Respecto a la emanación de esta sustancia cabe destacar que se ha observado un incremento en las últimas décadas.
Cómo pasar la ITV en España
En primer lugar, hay que llamar solicitando día y hora (en algunas estaciones no es necesario), según la estación se da con mayor prontitud. Al tener hora de “visita” no hay que esperar demasiado. En la entrada de la estación hay que entregar la ficha técnica del vehículo. Las tasas se deben haber pagado previamente.
Una vez en el interior, la inspección consta de varios pasos. El proceso se inicia por los acondicionamientos exteriores del vehículo, el segundo paso es la inspección de la carrocería, el tercero el acondicionamiento interior, posteriormente se comprueba la señalización, después la iluminación, los frenos, la dirección, los ejes y la suspensión y, por último, el bastidor, el motor y las transmisiones en donde se incluye las emisiones contaminantes.
Al finalizar las pruebas, el mecánico hace entrega de la hoja de pruebas donde consta las deficiencias observadas. A partir de ese momento se da un plazo para acudir a un taller y realizar las reparaciones pertinentes y volver a la ITV.
Una vez se pasa la inspección, se le da al conductor un adhesivo, que antes solíamos colocar en la parte derecha del parabrisas. Esta pegatina indica cuándo deberemos realizar la próxima inspección.
Treinta años de historia
La inspección técnica nació a principios de los años sesenta del siglo pasado con el objetivo de revisar vehículos industriales y de servicio público. El Ministerio de Industria creó una red que incluía una instalación en cada provincia. En la década de los años 80, únicamente existía una treintena de plantas en toda España.
El retraso en los planes motivó que la Administración permitiera la entrada a entidades colabora doras en 1982, un año antes de transferir las competencias a las comunidades autónomas. Un decreto de 1985, que obligaba a los turismos a pasar la ITV, forzó a las comunidades a extender las redes.
Algunas optaron por la financiación oficial, otras convocaron concursos para otorgar concesiones como es el caso de Cataluña. En 1983, la Generalitat otorgó las concesiones por concurso público. Muchas de las empresas que se hicieron con concesiones, tuvieron que adquirir terrenos, hacer obra civil, comprar maquinaria, contratar personal…
Y según la historia, la ITV se cobra al principio para amortizar las inversiones que se hicierion en la construcción de las estaciones de ITV.