A lo largo de la historia de la humanidad el hombre fue aprendiendo medios para conservar y también utilizar mejor los alimentos haciéndolos más digeribles y apetitosos. La necesidad de comer en algunos lugares, se convirtió en el soporte de una arte del bien cocinar.
Así aparece la gastronomía, gracias a la cual se transforma en un acto psicológico humano, en un verdadero placer que abarca desde necesidades psicológicas de convivencia y relación hasta en gozoso regalo para la vista, sin olvidar naturalmente su misión fundamental: convertir la obligación de consumir alimentos en un halago para el olfato y el paladar.
Pero, además, ese consumo de alimentos debe realizarse de manera equilibrada, sobre todo después de las vacaciones de verano o cualquier otro periodo de descanso y desconexión de la rutina. Se hace indispensable cuidar nuestro proceso de nutrición.
Seguir una dieta equilibrada después de vacaciones
Es por ello, que se hace imprescindible llevar una dieta equilibrada tras las vacaciones, pero cuidado, hay que seguir una serie de factores para adelgazar sin que después surjan problemas de salud.
- Reducir las calorías diarias que ingerimos: Así obligaremos al organismo a gastar sus reservas, que son las grasas acumuladas.
- No olvidar que existen unos nutrientes que son básicos para el organismo y que hay que tomar una cantidad diaria, sin la cual éste se deteriora. Estos son: proteinas, vitaminas y minerales.
- Aunque disminuyamos las calorías diarias, no debemos pasar hambre. Esto sería contraproducente porque el hambre es el principal responsable de que se abandone el régimen. Debemos tomar alimentos con pocas calorías siempre que se sienta hambre.
- El adelgazar no supone suprimir ninguna comida, ya que, aunque esto represente ingerir menos calorías, también se da una reducción de los nutrientes básicos que no se pueden dejar de tomar.
- El tomar fármacos sin el específico consejo médico es una barbaridad que estamos acostumbrados a ver, y de esto saben mucho varios nutricionista Barcelona . Por eso, cuidado, que la pastilla que toma su vecina puede llegar a producir en su organismo secuelas irreversibles. Si finalmente se opta por los fármacos no olvide que sólo el especialista puede recetarlos.
- Los diuréticos y laxantes, entre los que están también las infusiones, en un principio pueden producir una reducción de peso, debido a que eliminan el agua extra celular, pero no hacen rebajar las grasas, y cuando dejemos de tomar el diurético, volveremos a retener el agua que habíamos perdido, volviendo a aumentar algo de peso.
Por último, una dieta equilibrada, siempre consultada y guiada por especialistas, nos puede ayudar realmente a perder peso. Es por eso, que se recomienda ir sustituyendo los manjares ricos en grasas y azúcares por nutrientes proteicos, sin olvidar tampoco las vitaminas y minerales. Es por todo ello, que una dieta equilibrada (rica en verduras, frutas, leche…) nos ayudará a perder peso después de las vacaciones.
Y se hace necesario recordar que la obesidad es una de las enfermedades más comunes en nuestra civilización. Esto es fácil de comprender si pensamos que cuanto más avanzada es la tecnología, menos ejercicio físico hace el hombre, pero sin dejar de injerir unas calorías que ahora ya no necesita.
1 comentario
Interesantes las reflexiones que escribes Silvia.
Saludos