La mitad de los españoles entre 45 y 70 años presenta síntomas asociados al déficit hormonal como la irritabilidad, la fatiga y los trastornos del sueño, así como la disminución de las funciones cognitivas, intelectuales y físicas.
A partir de los 45 años el varón experimenta un declive paulatino en los niveles de andrógenos en sangre, principalmente en la testosterona, lo que conlleva cambios hormonales que no implican únicamente deficiencias en la función sexual, ya que el déficit de testosterona repercute también en una pérdida de masa muscular y de resistencia física, así como en la falta de atención y concentración, en un mayor riesgo de osteoporosis, irritabilidad y fatiga. Todo ello lleva a la pérdida del apetito sexual.
Sin embargo, la falta de apetito sexual no es siempre el problema. Muchos varones, generalmente a partir de los 35 años de edad, se encuentran más bien con problemas “físicos”. La impotencia se convierte en un mal que a muchos le cuesta superar. De hecho, muchos recurren a la viagra, siendo los barceloneses (14,3%) y los madrileños (14,4%) los que más acuden a ella.
Los especialistas calculan que más de 1,5 millones de españoles padecen disfunción eréctil, “enfermedad que se sufre en silencio”. No siempre esta disfunción eréctil o impotencia es causada por la edad, el estrés y problemas personales. En muchas ocasiones se produce también por sufrir alguna enfermedad grave o haberse sometido a algún tipo de operación grave.
La tecnología ha ayudado a muchos hombres a recuperar su vigor varonil. Gracias a las conocidas como bomba de vacio, los varones tienen una nueva oportunidad para mejorar la disfunción eréctil.
¿Qué son las bombas de vacío?
Las bombas de vacío son un dispositivo médico que permiten no solo mejorar la disfunción eréctil de los varones, sino también trabajar la rehabilitación tras una prostatectomía radical o simple. Este dispositivo médico también permite mejorar el rendimiento sexual de los hombres, gracias a un trabajo diario y constante.
Existen actualmente en el mercados varios dispositivos de bombas de vacío, comercializados por Martimedic, líderes en el suministro de equipamientos y dispositivos médicos y quirúrgicos. Tres son las bombas de vacío que ahora mismo se comercializan:
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Bomba de vacío manual
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Bomba de vacío eléctrica
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Bomba de vacío REHABI-PVT
Las dos primeras están indicadas especialmente para problemas de disfunción eréctil e impotencia, mientras que la tercera, para un periodo de rehabilitación tras una prostatectomía.
Bomba de vacío tras una prostatectomía
Como se recoge en la web de Martimedic, la bomba de vacío REHABI-PVT está indicada para entrenar “los cuerpos cavernosos tras prostatectomía radical conservadora de nervios y tras intervenciones en la pelvis menor. Mejora la capacidad de erección y trabaja la reducción de una posible incontinencia tras la intervención quirúrgica”.
Además, como entrenamiento de los cuerpos cavernosos, en el caso de la IPP (enfermedad de La Peyronie) , también ayuda a reducir el grado de deformación del pene. En cualquier caso, el uso de una bomba de vacío debe tener lugar durante un periodo de tiempo determinado y regulado por nuestro medico.
Recuperación por diferentes patologías
Las bombas de vació están indicadas ante diversas patologías o trastorno que sufre el varón. Desde la diabetes o la depresión, hasta lo causado por determinados medicamentos o enfermedades neurológicas. Por ser más específicos, a continuación detallamos un listado de patologías:
- Insuficiencia renal o hepática.
- Efectos secundarios causados por determinados medicamentos (contra la hipertensión, trastornos del ritmo cardiaco, reductores de los lípidos en sangre, anti-inflamatorios, anti-depresivos, duréticos…).
- Por consumo de tabaco, alcohol o drogas.
- Enfermedades neurológicas (esclerosis múltiple, paraplejia).
- Enfermedades vasculares de los cuerpos cavernosos del pene.
- Enfermedades vasculares (arterioesclerosis).
- Infarto de miocardio y accidente cerebrovascular.
- Hipertensión y otras enfermedades cardiovasculares.
- Operación de próstata.
- Diabetes.
- Alta concentración de lípidos en sangre.
- Depresión u otros trastornos psicológicos.
¿Cómo funciona una bomba de vacío?
Las bombas de vacío producen una presión negativa en el interior del cilindro en torno al pene. De este modo los cuerpos cavernosos se llenan de sangre provocando la rigidez del miembro. Estas erecciones son de importancia fundamental para la rehabilitación o conservación de la capacidad de erección.
La sangre arterial rica en oxígeno fluye a través de los cuerpos cavernosos, de forma que los vasos se oxigenan mejor y se entrena la musculatura lisa de los cuerpos cavernosos. De este modo se impide la transformación del tejido del cuerpo cavernoso en tejido conjuntivo no elástico y con ello, se impide una disminución de la longitud del pene y de la circunferencia del pene evitándose la pérdida de la capacidad de erección.