El trabajo en remoto o teletrabajo se ha extendido a lo largo del mundo desde la pandemia de la Covid-19. Esto llevó a muchos trabajadores a adaptar su hogar para trabajar como si estuviera en la oficina, comprando material, sillas, escritorios y todo lo necesario para poder trabajar de una manera eficiente.
De hecho, las estrictas medidas de confinamiento en el año 2020 en muchos países de América Latina y Europa, llevó a las empresas a mandar a casi todos sus trabajadores de oficina a casa, desde donde podían seguir trabajando desde la seguridad de su hogar sin que la eficiencia y el rendimiento del trabajo se viera afectado. Así, gracias al trabajo en remoto, muchas empresas aguantaron las duras medidas de confinamiento ante el avance de la Covid-19.
Debido a la pandemia, hoy muchas empresas han continuado apostando por el trabajo en remoto, especialmente las grandes compañías multinacionales. Por ello, es importante contar con un espacio de trabajo en casa adecuado, así como un escritorio ideal adaptado a nuestras necesidades.
Recomendaciones para elegir el escritorio adecuado
Lo primero que debemos hacer es elegir una zona donde llegue la luz natural, y si puede ser en una habitación diferente donde pasamos el resto del tiempo mucho mejor. Ahí colocaremos nuestro escritorio para hacer home office. Elegida la zona de trabajo, el escritorio que compremos debe tener unas características específicas:
- Ancho, alto y profundidad del escritorio. El tamaño del escritorio es fundamental. Se recomienda un mínimo de 120cm de largo por unos 60 u 80 centímetros de profundidad. Todo dependerá de si contamos con más de una pantalla o monitor, pero lo mínimo recomendado son los 120cm de largo. En cuanto a la altura, lo recomendable son 70cm. Si elegimos un escritorio que es regulable en altura mucho mejor, porque lo adecuaremos a la posición adecuada según nuestra altura y la altura de la silla que compremos.
- Hueco bajo las piernas. Este es otro aspecto importante, ya que en ocasiones se compra un escritorio demasiado pequeño con cajones en los laterales, lo que hace muy complicada la movilidad de las piernas y la silla. Lo recomendable es que quede un hueco bajo el tablero de al menos unos 80cm.
- El grosor del tablero. Como mínimo el grosor del tablero debe ser de unos 7cm. Este aspecto es muy importante si vamos a tener un equipo pesado encima, especialmente cuando se tienen varios monitorios y varios equipos electrónicos encima. Lo que menos queremos es que el tablero se rompa por el peso.
- Estética. Otro punto para tener en cuenta es la estética del escritorio. Aunque parezca que no es importante, debe tener una “coherencia” con el resto de la decoración de la habitación, para que este no sea un elemento disruptivo en la estancia, y esto nos acabe afectando (sin ser conscientes) al rendimiento laboral.
Además, es importante contar con un escritorio amplio, limpio y ordenado, como si realmente estuviéramos en la oficina. Además de nuestro equipo informático como ordenador, portátil, tablet y móvil habitual, deberemos contar con todo el material de oficina al alcance y a la vista, para que el cerebro relacione todo ello con el trabajo.